jueves, 16 de abril de 2009

Se nos va la vida en un domingo de junio... (asi parece)

Hace unas semanas, la sociedad Argentina vivió la despedida del ultimo gran líder político del Siglo XX.
La casualidad hizo que, justo en esa época, gobernara su país, ese por el que tanto lucho, un grupo de personajes alejados de los ideales democráticos e carentes de respeto de las instituciones. Eran todo lo contrario a lo que representaba Raúl Ricardo Alfonsin.
El desprecio a las instituciones de ese grupo se ve reflejado en la idea del ex Presidente en funciones, Néstor Kirchner, de plebiscitar todos los mandatos, ordenando a gobernadores e intendentes a ser candidatos –ya sea como diputados o concejales- por sus distritos, confirmando su carente espíritu democrático y respeto por las autoridades.
Algunos intendentes y gobernadores, como la mismísima Presidenta, han sido elegidos hace 2 años y no debemos tomar esta elección como un plebiscito que defina su continuidad o no en el cargo. La presidenta debe terminar su mandato, pero también es cierto que debe modificar actitudes y cambiar el rumbo.
Luego de un análisis profundo de la situación, quedan planteadas algunas dudas: Si el gobierno pierde las elecciones y, por ende la mayoría en el congreso, ¿tendremos 6 meses de leyes aprobadas a gusto y placer del matrimonio K? Elegidos 6 meses antes de su asunción ¿tendremos un Congreso paralelo funcionando? Ante una eventual derrota ¿cómo actuará el gobierno, con más autoritarismo o entendiendo el mensaje de las urnas y cambiando actitudes?.
La única certeza es la realidad y esta nos indica que estamos frente a un escenario electoral que, aún llamando al Chavo del 8 para encabezar la lista en la provincia, marcara una derrota del kirchnerismo en el interior del país.
El gobierno, una vez mas, se olvida del federalismo y apunta los cañones al conurbano bonaerense como si fuera el centro del Universo. Nuevamente se olvidan de que el interior también existe y, quizás de nuevo, les termine costando una derrota.
Mientras tanto, no debemos perder de vista la creación de un proyecto de país, el cuidado de la salud, la educación, el fomento de la democracia, el respeto por las instituciones y la protección a los desposeídos.

AHORA MAS QUE NUNCA, LA UNION NACIONAL.